"En cuanto al impacto de estos acontecimientos en los bancos rusos, apenas podrían sufrir un efecto considerable sobre su estabilidad financiera debido al pequeño volumen de activos frente a los volúmenes de los grupos (financieros)", dijo.
Indicó que tras 2014 la actividad empresarial en Ucrania dejó de ser estratégicamente importante para los bancos rusos.
"En cuanto a la financiación del negocio, entre el 50 y el 60% de la financiación de las filiales ucranianas proviene de estructuras matrices, es decir, en mayor grado dependen del apoyo financiero de sus estructuras matrices rusas", explicó.
Anteriormente el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, aprobó la aplicación de sanciones durante un año a cinco bancos rusos, incluido Sberbank.
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Entre otras restricciones, se prohíbe a las empresas estatales de Ucrania depositar fondos en las filiales de los bancos rusos en el país.
Además, se restringe la transferencia de capitales fuera de Ucrania por los bancos rusos afectados por las sanciones.