El anteproyecto "reduce la financiación de las Naciones Unidas y organismos afiliados, incluyendo las operaciones de mantenimiento de la paz y otras organizaciones internacionales, con la expectativa de que frenen los gastos y compartan la carga de financiación de forma más equitativa entre los miembros".
"EEUU reducirá su contribución a la ONU y no aportará más del 25% al presupuesto de misiones de mantenimiento de la paz", dice el documento.
La versión definitiva del anteproyecto de presupuesto, a ser debatida en el Congreso, se presentará en mayo.
En particular, la Casa Blanca propone recortar en un 28% las asignaciones para el Departamento de Estado, incluyendo una reducción del 38% en programas de ayuda exterior, paralelamente a un incremento del 10% en los gastos de defensa, y del 6% en el presupuesto del Departamento de Seguridad Nacional.