"Por el momento siguen las operaciones de búsqueda en el lugar del accidente en la zona del mar Negro, allí trabajan hoy tres naves y dos estaciones de buceo", dijo.
Los rescatistas salen al mar cuando el tiempo lo permite y "cada día sacan una pequeña cantidad de fragmentos del avión".
Ivanov aseguró que la operación seguirá hasta que haya resultados.
"Los buzos ven que todavía hay fragmentos que hay que sacar con gran cantidad de partes muy pequeñas, por eso la operación sigue", explicó.
El 25 de diciembre de 2016, un Tu-154 del Ministerio de Defensa ruso que partió de Moscú con destino a Latakia, Siria, cayó en el mar Negro poco después de despegar del aeropuerto de Sochi donde hizo una escala para repostar.
A bordo de la aeronave se encontraban ocho tripulantes y 84 pasajeros, entre ellos 64 integrantes del Conjunto de Canto y Danza Alexándrov del Ejército ruso que se dirigían a Siria para dar un concierto en la base de Hmeymim, así como ocho militares, nueve periodistas y la famosa activista humanitaria Elizaveta Glinka.