"Sin duda, consideramos que es necesario tener más cuidado al evaluar la situación, especialmente para identificar los orígenes de las provocaciones", dijo.
Peskov volvió a insistir también en que Rusia no está involucrada en el conflicto de Donbás.
La víspera, el Departamento de Estado de EEUU condenó el ataque mencionado, que tuvo lugar el 24 de febrero, al acusar a las milicias de Donbás, supuestamente apoyadas por Rusia, de violar el armisticio.
En abril de 2014, Ucrania lanzó una operación militar en las provincias orientales de Donetsk y Lugansk donde se proclamaron repúblicas populares en respuesta al cambio violento de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
De acuerdo con la ONU, las hostilidades provocaron ya más de 10.000 muertos.