"El acuerdo entre la UE y Cuba rompe las limitaciones impuestas hace 20 años"

"En la práctica el nuevo acuerdo implica la posibilidad de firmar convenios entre los distintos países sin las limitaciones impuestas por una restricción de hace 20 años", dijo a Sputnik José Bell Lara, profesor titular de la Universidad de La Habana y de Flacso.

Las bases para el vínculo entre Europa y Cuba se discutieron durante dos años. Regirán de forma provisional y parcial dos meses después de que el gobierno cubano comunique su aprobación de manera oficial. Para su aplicación total debe ratificarse por el parlamento europeo y el cubano, y por los diputados de los 28 países miembros de la Unión Europea. El rechazo de cualquiera de estos organismos cancelaría el acuerdo.

Dentro del viejo marco, la cooperación europea dependía de la opinión del bloque sobre las libertades políticas y los derechos humanos en Cuba. El profesor Bell Lara explicó que la derogación de la posición común europea fue impuesta durante el gobierno de José María Aznar en España en 1996, cuando había quienes pensaban que la Revolución Cubana "tenía los días contados".

"Fue durante la década de la ley Torricelli, de la ley Helms-Burton [en 1992 el embargo impuesto en 1960 por Estados Unidos fue reforzado Ley Torricelli, y en 1996 por la Ley Helms-Burton. Se establecía, entre otras cosas, que las filiales estadounidense en terceros países no podían establecer relaciones comercial con Cuba]. Esto venía a completar el cerco al dificultar y obstaculizar las relaciones económicas y políticas de la isla con Europa. Era realmente un complemento del bloque de los EEUU", señaló el Doctor en Ciencias Filosóficas y autor de 27 libros.

No obstante, tras 20 años, algunos países de la Unión Europea han comenzado a darse cuenta de que aquello era un "absurdo" y comenzaron a tener relaciones con Cuba, indicó Bell Lara, y agregó que el nuevo acuerdo "abre una perspectiva que ahora depende de la actividad que realicen los distintos actores".