El responsable de la Comisaría de Homicidios de la ciudad, Rivaldo Barbosa, explicó que el 40% de homicidios se producen en cuatro barrios: Campo Grande, Santa Cruz, Realengo y Pavuna, todos ellos situados en los suburbios de las zonas oeste y norte de la ciudad, los más desfavorecidos.
Barbosa explicó que la principal dificultad que afronta la policía es que hay que montar diferentes estrategias de investigación en cada barrio, ya que en cada zona el crimen tiene unas características propias.
Así, los barrios de la zona oeste están dominados por los milicianos, mientras que en Pavuna predomina el tráfico de drogas y en barrios como Realengo "hay un poco de todo", explicó a modo de ejemplo.
Río de Janeiro viene registrando un aumento de la violencia a lo largo de este año que los expertos achacan, en parte, a las dificultades financieras del Gobierno del Estado de Río, de quien depende la Policía Militar.