La moción fue presentada por la presidenta del Parlamento unicameral, la oficialista Gabriela Rivadeneira, quien señaló que "el proceso parlamentario en contra de Rousseff tenía vicios de nulidad desde sus inicios y sienta un nuevo precedente inaceptable para las funciones legislativas de la región".
En la resolución, la Asamblea rechaza "todas las formas de golpe de Estado o de desestabilización política que se puedan instaurar en nuestros países latinoamericanos, con la finalidad de violentar nuestras democracias e irrespetar la soberanía popular".
Según la titular del organismo, los Parlamentos deben ser garantes de la democracia y la voluntad popular, en lugar de "instrumentos para fraguar golpes de Estado".
El pronunciamiento del Parlamento se refiere a violencia de género y discriminación política ejercida contra Rousseff e invita a otros órganos legislativos de la región a reprobar "este golpe".
La presidenta de la Asamblea hizo un llamado "a todo el arco progresista y democrático, a quienes sin necesariamente pertenecer o simpatizar con nuestro espacio político, comparten banderas populares, progresistas y latinoamericanistas, para que siga siendo el pueblo, en democracia, sin privilegiados de ninguna clase, el dueño de su destino".
La resolución fue aprobada en el pleno del legislativo con 84 votos a favor.
El proceso de "impeachment" contra la expresidenta de Brasil finalizó el miércoles con su destitución en el Senado por 61 votos a favor y 20 en contra.