Unas 30 o 40 personas enmascaradas, a bordo de diversos coches, lograron forzar la puerta de la instalación y expulsar a los miembros de la Policía Nacional ucraniana encargados de custodiar el lugar.
Fuentes de la entidad bancaria —propietaria de la planta asaltada— expresaron su preocupación por la ausencia de una respuesta policial inmediata "a las acciones abiertamente ilegales que causan un daño significativo a la economía de la región, a Ucrania en general y a la imagen de la policía del país".
El inicio de la empresa petrolera 'Azovskaya' se remonta a un proyecto de inversión del año 1999, con un valor de más de 63 millones de dólares y una extensión de 18 hectáreas. Posteriormente, se hicieron trabajos de modernización de la instalación y la capacidad de tratamiento de crudo ascendió a 411.000 toneladas anuales.