Se comenta que las informaciones son anónimas y dicen que los ataques pueden ser perpetrados "por toda la ciudad".
La sede de la Policía de Dallas permanece cerrada y la custodian fuerzas especiales, según comunicó la cadena local de televisión CBS a través de su sitio web.
El jueves pasado en varias ciudades de EEUU estallaron manifestaciones de protesta tras el asesinato por los policías de dos afroamericanos en Luisiana y Minnesota.
Durante los disturbios en Dallas, un afroamericano veterano de la guerra en Afganistán, identificado posteriormente como Micah Johnson, de 25 años y residente en Dallas, abrió fuego contra los policías y mató a cinco oficiales.
El atacante fue abatido por los agentes tras horas de frustradas negociaciones, en las que llegó a afirmar que había disparado contra policías blancos para vengar las muertes de los dos afroamericanos.