También señaló que mientras la coyuntura política dicta sus condiciones a los empresarios extranjeros, "Rusia trata con un especial respeto a los inversores y las compañías que llegan a trabajar en su territorio".
"Procuraremos crearles condiciones para que se sientan cómodos y les sea ventajoso realizar proyectos importantes en la economía rusa", agregó.
Medvédev pidió a los ministros estudiar con un especial esmero las solicitudes de las compañías extranjeras dispuestas a invertir en las empresas rusas de importancia estratégica.
"Tal cooperación es provechosa para las dos partes: las compañías rusas reciben recursos financieros, tecnologías y gestión modernas, además de productos innovadores, y los socios extranjeros a su vez logran fortalecer sus posiciones en el mercado ruso", recalcó.