El mero hecho de dar voz al mandatario de Siria es elogiable, pero el cambio del sentido de sus palabras en los materiales es algo lamentable, afirma el periódico alemán Deutsche Wirtschafts Nachrichten.
En la entrevista, el periodista Thomas Aders preguntó a Bashar Asad sobre si Siria "permanece como un Estado soberano o si Teherán o el Kremlin dictan su política". El mandatario sirio contestó de la siguiente manera:
"Antes de la crisis, cuando Israel ocupaba una parte de nuestro territorio, nuestra soberanía no era completa, lo fue solo hasta recuperar nuestra tierra. En la crisis vigente, nuestra tierra está invadida por varios terroristas, así como por las aeronaves de EEUU y sus aliados que violan nuestro espacio aéreo. Nuestra soberanía de nuevo no está completa. Pero seguimos siendo soberanos, aunque no por completo, con la constitución, las instituciones estatales y el cuidado hacia nuestro pueblo. Son los elementos externos del poder en Siria los que son el mayor problema", afirmó Bashar Asad.
Además, Aders comentó que "para Asad, mantener su régimen es crucial y está dispuesto a hacer todo lo posible para conseguirlo, hasta luchar contra cualquier terrorista". Sin embargo, durante la entrevista el mandatario sirio se expresó de manera clara que mantenerse en el poder no es el objetivo final, afirma el periódico.
"Si el pueblo sirio quiere que me vaya, dimitiré inmediatamente", dijo Asad.
La cadena ARD tenía esperando cuatro años para entrevistar a Asad, según el artículo, pero a pesar de lo loable de la acción de darle voz, el trastorno de las palabras de su interlocutor es lamentable, concluyó Deutsche Wirtschafts Nachrichten.