"Fue parte de una estrategia", dijo Clinton en una entrevista a Telemundo en referencia a la política del actual Gobierno: "pienso que esa estrategia ya no funciona, así que, en consecuencia, creo que tenemos que aplicar la ley de una manera menos dura y agresiva", explicó.
Agregó que, de resultar elegida presidenta, evitaría la deportación de inmigrantes.
"Creo que todo el mundo tiene derecho a una segunda oportunidad", afirmó.
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Según el diario The New York Times, que recoge las declaraciones de Clinton, la ex secretaria de Estado estadounidense buscaría distanciarse de la política del presidente Barack Obama en materia de medio ambiente o política exterior.
Clinton también dijo estar "furiosa" por las polémicas declaraciones sobre la inmigración del principal candidato a las primarias del Partido Republicano, Donald Trump, aunque admitió haber frecuentado los círculos del magnate y político republicano cuando era senadora por Nueva York.
"Nunca fue así (…) le vi de vez en cuando en acontecimientos en la ciudad y nunca le oí decir algo así", manifestó la demócrata: "no entiendo por qué está haciendo lo que está haciendo", concluyó.