Brennan también informó a Tamir Pardo, director de los servicios de espionaje exterior de Israel, el Mosad, acerca de la implicación de Irán en actividades "terroristas y subversivas" en Oriente Medio, tal y como han indicado fuentes del Gobierno israelí a Haaretz.
El jefe de la CIA se reunió con otras figuras destacadas, como el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el máximo responsable de los servicios de espionaje militar, el general Herzl Halevi, y el consejero de Seguridad Nacional, Yosi Cohen.
Las fuentes citadas por Haaretz señalaron que la visita de Brennan, que concentró varias reuniones el jueves pasado, estaba planeada desde hacía tiempo, pero que no obstante tuvo lugar en un momento sensible, cuando faltaba un mes para que Irán y las potencias mundiales firmen el acuerdo respecto al programa nuclear iraní.
Se desconoce si Brennan transmitió a Netanyahu algún mensaje concreto sobre este pacto del presidente de EEUU, Barack Obama.
Israel y Washington mantienen posturas alejadas respecto a la cuestión nuclear iraní: Netanyahu ha reiterado públicamente que se opone al acuerdo y que intentará evitarlo como sea, mientras que Obama ha rechazado en diversas ocasiones las críticas del primer ministro israelí y ha asegurado que este pacto es la mejor manera de evitar que el régimen de Teherán consiga armas nucleares.
Brennan habló con los israelíes de las actividades iraníes en la región en general.
Netanyahu ha advertido en las últimas semanas de que ha aumentado la participación iraní en Irak, Siria y Yemen, así como de la creciente cantidad de armas que Teherán proporciona al grupo chií libanés Hizbulá, y que Irán pretende lanzar ataques contra intereses israelíes en el extranjero.
Pocos días antes de su visita secreta a Israel, Brennan subrayó en el programa Face the Nation, de la cadena de televisión estadounidense CBS, que las tensiones diplomáticas y políticas entre Obama y Netanyahu no están perjudicando a la cooperación entre los servicios de espionaje de los dos países.
Según Brennan, "hay una relación muy, muy fuerte entre EEUU e Israel en el campo de los servicios de inteligencia, la seguridad y los frentes militares".
"Es una de las grandes cosas, creo yo, de nuestro sistema: puede haber diferencias políticas entre nuestros Gobiernos, pero los profesionales de los servicios de inteligencia y de la seguridad sabemos que tenemos la obligación de mantener a nuestros países a salvo y seguros", añadió.