Preguntado sobre la posibilidad de extender tal experiencia a Europa, el mandatario contestó que "sin duda", agregando que se trata de una política con enfoque humano.
"Cuando uno enfoca las cosas con una visión de humano, uno no ve las diferencias políticas, sino la tragedia humana, y uno trata de sanar estas heridas", declaró.
"Esta cumbre sirvió para que se sanaran heridas de muchos años, se serraran y abriera una nueva etapa de paz y cooperación en las Américas", agregó.
"Y como dije en mi mensaje, esto es una luz que no solo va а irradiar este continente, sino que va a llegar a otras partes del mundo", continuó el presidente.
A juicio de analistas, el acontecimiento central de la Cumbre de las Américas recién clausurada fue el encuentro entre los líderes de Cuba y EEUU, Raúl Castro y Barack Obama, el primero en medio siglo, que transcurrió en un espíritu constructivo, según comentó la Cancillería Cubana.
La reunión entre Obama y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que se produjo poco antes de clausurarse la Cumbre atrajo la atención general y fue valorada positivamente por el líder venezolano, quien durante la reunión plenaria criticó duramente al presidente de EEUU y exigió levantar las sanciones impuestas contra su país.
