"Ahora no tenemos oligarquía; hay gente rica, pero no gobiernan el país", dijo tras participar en la mesa redonda con motivo del 15º aniversario de Vladímir Putin en el poder.
Al asumir la jefatura de Estado en 2000, Putin comenzó a llevar a cabo la política de mantener a los oligarcas a distancia de las estructuras del poder.
En 2008, resumiendo sus dos primeros mandatos, destacó que las autoridades rusas dejaron de tomar decisiones a favor de los grupos de oligarcas y empezaron a tomar en consideración los intereses del pueblo.
En 2012, Putin volvió a mencionar ese logro durante su campaña electoral al prometer "vencer la corrupción al igual que fue vencida la oligarquía".