"No veo que tenga sentido alguno reunirse antes de la decisión de la Rada", declaró Pushilin a los periodistas.
El jueves el subjefe de la administración del presidente de Ucrania, Vitali Kovalchuk, declaró que la Rada Suprema podría estudiar el tema de las regiones con un estatus especial la semana que viene.
Pushilin declaró igualmente que la discusión sobre Debáltsevo debe realizarse en el marco de los subgrupos.
"Esperamos que durante el transcurso de la semana que viene encontremos los puntos de contacto respecto al trabajo de los subgrupos", añadió.
Anteriormente trascendió que se organizarán cuatro subgrupos en total, que trabajarán sobre diversos aspectos del armisticio, incluyendo la retirada de las armas, el intercambio de prisioneros y otros temas.
Pushilin subrayó que cualquier incumplimiento de los plazos establecidos por los acuerdos de Minsk implicarán un empeoramiento del conflicto en la región, y que "si no se toman decisiones respecto a los puntos siguientes, será inevitable un resurgimiento del conflicto".
Además, el representante de la RPD señaló que las decisiones respecto a las regiones de Donbás con estatus especial solo podrán ser tomadas en el marco del Grupo de Contacto, los países del Cuarteto de Normandía solo pueden ayudar.
"Existe de hecho un órgano que se llama Grupo de Contacto, en cuyo marco deben transcurrir las discusiones y en base a ello, tomarse las decisiones", comentó Pushilin a los periodistas, que le preguntaron quiénes debían participar en la discusión de este tema.
"Los líderes del Cuarteto de Normandía solo pueden aupar y ejercer cierta presión, ayudar en cierto sentido, pero no pueden hacer nada en lugar de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, y de Ucrania, ni obligarlas por la fuerza", añadió.
Según los últimos estimados de la ONU, más de 6000 personas han perdido la vida en el conflicto.
Las partes intentaron en varias ocasiones llegar a acuerdos con mediación de Rusia y la OSCE.
El último encuentro del Grupo de Contacto, acontecido el 12 de febrero, concluyó con la aprobación de un paquete de medidas dirigidas a lograr el cumplimiento de los acuerdos de Minsk, en particular, el cese al fuego a partir del 15 de febrero, la retirada del armamento pesado y la creación de una franja de seguridad.
Tras el armisticio se reanudaron los enfrentamientos, las partes se acusan mutuamente de violar el alto al fuego y afirman que solo responden a los ataques enemigos.