La víspera el líder estadounidense, Barack Obama, exhortó al Congreso a autorizar el uso de la fuerza contra el EI en Siria e Irak.
"Estamos ante el inicio de una importante guerra, pero las Fuerzas Armadas de Irak no carecen de soldados", dijo al Jaafari después de la reunión con su homólogo australiano, Julie Bishop.
Por su parte, Bishop declaró que Australia no enviará más tropas de tierra a Irak, mantendrá su actual contingente militar, compuesto de 600 soldados, y se centrará en la operación aérea.
En el encuentro, celebrado este jueves en Canberra, el canciller de Irak agradeció a Australia su apoyo en la lucha contra el EI, en particular señaló su participación en la operación área, el intercambio de datos de inteligencia y la ayuda en la formación de las fuerzas de seguridad iraquíes.
La expansión del Estado Islámico (EI) se convirtió en uno de los mayores desafíos para la comunidad internacional durante 2014.
Ese grupo yihadista proclamó un califato que se extiende actualmente desde la ciudad de Alepo, en el norte de Siria, hasta la provincia de Diyala, en el este de Irak.
EEUU, con la ayuda de sus aliados, entre ellos Australia varios países árabes, comenzó en agosto pasado bombardeos contra las posiciones del EI.