"Las economías de Rusia y la Unión Europea son vasos comunicantes, por eso las sanciones que creó Occidente producen el efecto bumerán en Letonia, afectando especialmente a sus empresas de industria alimenticia y ligera, orientadas a exportar sus productos a Rusia", dijo el diplomático.
Las pérdidas de los productores de leche se estiman en 60 millones de euros.
También en los sectores de turismo surgió un clima negativo para las inversiones.
El año 2014 resultó ser el peor de los últimos 20 años en las relaciones entre Letonia y Rusia, constató.
Las relaciones entre Rusia y Occidente empeoraron desde el inicio de la crisis en Ucrania.
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan tanto a particulares como a empresas y sectores enteros de la economía rusa.
En respuesta, Rusia embargó algunas importaciones alimenticias de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.