El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha rechazado hoy de forma contundente las críticas de EEUU y la Unión Europea a su decisión de construir 1.060 nuevas viviendas en colonias judías en la parte este de Jerusalén, zona palestina ocupada por Israel desde 1967.
Netanyahu ha calificado las condenas expresadas por la comunidad internacional como "declaraciones desconectadas de la realidad". "He escuchado afirmaciones de que nuestra construcción en los barrios judíos en Jerusalén aleja la paz", ha indicado Netanyahu en referencia a las declaraciones del departamento de Estado de EEUU, que ayer señaló que el nuevo proyecto de viviendas es "incompatible" con la paz.
"La crítica es lo que nos aleja de la paz. Estas declaraciones infunden la retórica vacía de los palestinos. La UE y EEUU aplican un doble rasero cuando se trata del conflicto entre israelíes y palestinos", ha subrayado Netanyahu.
"Cuando Abu Mazen [el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás] incita al asesinato de judíos en Jerusalén, la comunidad internacional se mantiene en silencio", ha indicado Netanyahu.
"Y cuando construimos (viviendas) en Jerusalén se indigna. No acepto eso. De la misma manera que Francia construye en París y Gran Bretaña en Londres, los israelíes construyen en Jerusalén. Vamos a seguir haciéndolo", ha asegurado.
La parte este de Jerusalén pertenece, según la ley internacional, a los palestinos, que quieren que sea la capital de su futuro Estado, pero Israel la ocupó en 1967 y se la anexionó posteriormente. El caso de Jerusalén no tiene nada que ver con el de París o Londres.
La portavoz del departamento de Estado de EEUU, Jen Psaki, dijo ayer a los periodistas: "Si Israel quiere vivir en una sociedad pacífica, necesita tomar medidas que reduzcan las tensiones. Avanzar en este tipo de acción (ampliar colonias) es incompatible con la búsqueda de la paz".
"Consideramos que las actividades en los asentamientos son ilegítimas y nos oponemos a medidas unilaterales", agregó Psaki. El secretario de Estado, John Kerry, habló con Netanyahu por teléfono, tras el anuncio del primer ministro, para discutir sobre el nuevo plan, comentó Psaki.
La UE pidió aclaraciones y dijo que una decisión de este tipo, en caso de confirmarse, sería "imprudente e inoportuna" y "pondría cuestión el compromiso de Israel a una solución negociada con los palestinos".
"Hacemos hincapié en que el futuro desarrollo de las relaciones entre la UE e Israel dependerá de (su) compromiso hacia una paz duradera basada en una solución de dos estados", dijo Maja Kocijancic, portavoz de la jefa de la Política Exterior de la UE, Catherine Ashton.
