Es poco probable que EEUU cambie de postura sobre las causas de la catástrofe del Boeing malasio en Ucrania, incluso si los resultados de la investigación demuestran lo contrario, opina la senadora rusa Liubov Glébova.
“Ya es una práctica común que Washington manipule las pruebas y los hechos para que correspondan a su visión del mundo, hasta si su propia Inteligencia dice lo contrario”, indicó a esta agencia la legisladora, miembro del Comité de Asuntos Internacionales del Senado ruso.
El martes pasado, EEUU anunció que presentará datos de Inteligencia que supuestamente confirman que el Boeing de Malaysia Airlines fue derribado por los independentistas del este de Ucrania.
Este miércoles, un alto representante de Inteligencia estadounidense dijo a Reuters que Washington desconoce quién exactamente derribó el avión pero no descartó que fuese destruido por error o que el misil fuese lanzado “por una tripulación incompetente”.
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Según Glébova, “EEUU, regularmente y de la manera más indecente, manipula los hechos como le conviene”. “Cabe señalar que Washington no se siente nada incómodo y nunca pide disculpas por haberse permitido acusaciones infundadas”, dijo la senadora rusa.
El Boeing 777 de Malaysia Airlines que realizaba el vuelo MH17 de Ámsterdam a Kuala Lumpur se estrelló en el este de Ucrania el pasado 17 de julio. Murieron todas las 298 personas que estaban a bordo.
Este miércoles, las cajas negras de la aeronave llegaron a Reino Unido. Los expertos británicos tardarán hasta dos días en recuperar su contenido.