La mayoría de los rusos no teme a las sanciones por la adhesión de Crimea y está convencida de que esta península bañada por el mar Negro bien vale cualquier represalia, según una encuesta del Centro VTsIOM que cita hoy el diario Kommersant.
El sondeo, que se realizó en víspera y el mismo día del referéndum crimeo, reveló que solo uno de cada cuatro rusos considera la respuesta de Occidente lo bastante seria como para renunciar a la nueva entidad federada, siempre y cuando esa respuesta comprenda sanciones económicas o el ingreso de Ucrania a la OTAN.
Las ‘tonterías’ como la denegación de visados o el bloqueo de cuentas bancarias preocupan apenas al 15% de los encuestados. Circunstancia que, según el director general del VTsIOM Valeri Fiódorov, se explica por tres factores: “la euforia por la reunificación de Crimea; la indecisión de Occidente con la respuesta; y el hecho de que los ciudadanos no ven relación alguna entre las sanciones y su propio bienestar”.
“Las sanciones preocupan solo a las élites, la clase media alta y una parte de los empresarios. La mitad de la población jamás ha estado en Moscú siquiera, y un gran número no tiene pasaporte para viajar al extranjero”, indica a su vez Vladímir Petujov, director del Centro de Estudios Sociales Integrales dependiente de la Academia rusa de Ciencias.
Para poder valorar el posible impacto de las sanciones, “hay que estar informado lo suficientemente”, requisito que no se cumple en las mayoría de los casos, agrega el experto.
Además, la relación entre Moscú y Occidente nunca ha sido amistosa a ojos de los rusos de a pie, señala Mijaíl Mamónov, responsable de Investigaciones del VTsIOM. Si tras el conflicto con Georgia en 2008 el 39% de los encuestados calificaba esa relación como “más bien deteriorada”, ahora la cifra ha aumentado al 49%.
El estudio del VTsIOM también reveló que el 52% de los rusos tiende a pensar que en las relaciones con Occidente solo puede haber “tensión y desconfianza”, frente al 34% que admite la posibilidad de una colaboración como entre “amigos de verdad”.
