Los ciudadanos rusos desconfían de la capacidad de las autoridades para protegerlos ante posibles ataques terroristas, según se desprende de una encuesta que cita hoy el diario Kommersant.
El sondeo realizado por el Centro VTsIOM reveló que hay disparidad de opiniones sobre si se pudieron evitar los atentados que se perpetraron a finales de diciembre en la ciudad de Volgogrado con el saldo de 34 muertos. Mientras el 45% de los consultados considera que habría sido posible, el 44% sostiene que no hay forma de protegerse frente al terrorismo.
Tras los atentados en dos estaciones del metro moscovita en abril de 2010, el 54% de los participantes de un estudio similar dijeron que los ataques se habían podido evitar, frente al 33% que expresaron una opinión contraria.
Entretanto, la gran mayoría de los rusos (78%) sigue convencida de que el problema se debe resolver aniquilando a los terroristas, frente al 15% cree que hay que negociar con ellos buscando soluciones que aceptables para todos. No obstante, solo el 29% de los encuestados confía en que el Gobierno puede proteger a la población ante posibles nuevos ataques, mientras que los que no lo creen son el 63%, casi un 20% más que hace cuatro años.
“Hoy en día los ciudadanos rusos tienen una idea más adecuada sobre la capacidad de las autoridades para protegerles, ya que incluso los servicios de seguridad de Israel apenas pueden garantizar la seguridad de su población ante los terroristas”, comenta Anatoli Ermolin, veterano del grupo de operaciones especiales Vímpel dependiente del Servicio Federal de Seguridad.
Según el experto, el terrorismo busca desestabilizar un país infligiendo miedo a la población, y en caso de los atentados de Volgogrado los terroristas han logrado su propósito.
Por su parte, el director de Estudios Políticos del VTsIOM, Stepán Lvov, destaca que la confianza de los ciudadanos en que el Gobierno puede protegerlos siempre merma después de los atentados. La pregunta es cuánto tardará la opinión pública en volver a la normalidad, dice.
