El volumen de créditos vencidos en los bancos europeos se ha duplicado en los últimos cuatro años hasta superar el billón de euros. Las entidades financieras tratarán de liquidar estas deudas en vista de una inminente ronda de pruebas de resistencia por parte del Banco Central Europeo (BCE), escribe hoy la prensa rusa.
Según Védomosti, que cita un informe de la auditora PricewaterhouseCoopers (PwC), entre 2008 y 2012 el volumen de los créditos morosos aumentó de 514.000 millones hasta 1,187 billones de euros.
El deterioro se debe, en buena medida, a la grave situación económica en Irlanda, España, Portugal e Italia. Según los pronósticos PwC, en los próximos años los créditos morosos seguirán subiendo debido al “inestable clima económico” en Europa.
Los auditores detallan que donde más créditos vencidos hay es en Alemania (su volumen fue en 2012 de 179.000 millones de euros, lo mismo que el año anterior). En España su montante aumentó bruscamente en 2012: de 136.000 millones a 167.000 millones de euros. Por el contrario, en Gran Bretaña disminuyó de 172.000 millones hasta 164.000 millones de euros.
La semana pasada, el BCE anunció la intención de someter a examen la salud de la banca a partir de noviembre. Pasarán los tests las principales entidades financieras de la zona euro. Los exámenes se prolongarán durante un año.
Se trata de unas pruebas que tendrán como objetivo reforzar la transparencia de las entidades, subsanar los déficits de provisiones y capital que puedan aparecer de cara a otra supervisión bancaria de la eurozona en noviembre del 2014 que planea BCE.
Desde BCE adelantan que "la transparencia será el objetivo primario” de las pruebas.
“Esperamos que esta valoración fortalecerá la confianza del sector privado en la solvencia de los bancos de la eurozona y la calidad de sus balances”, señaló el presidente de la entidad, Mario Draghi.
Debido a las constantes pruebas, los bancos intentarán subsanar su situación financiera vendiendo los “activos problemáticos”, opinan los expertos.
En este sentido, Richard Thompson, de PwC, destacó el interés de inversores en los préstamos morosos, especialmente orientales. Además de fondos de EEUU y fondos soberanos.
Y mientras los bancos piensan en cómo hacer los deberes en vísperas de la prueba, las auditorías adelantan que sacarán a la venta cada vez más activos problemáticos.
Tanto en 2014, como más tarde.
