La alta tasa del desempleo entre jóvenes y la soledad de personas mayores son los males más grandes de nuestros tiempos, mientras que el problema de la Iglesia es que su gobierno, la Curia romana, se ocupa solo de la Santa Sede, ignorando el mundo que le rodea, considera el papa Francisco.
“Los grandes males que del mundo son el desempleo de los jóvenes y la soledad de de los viejos”, dijo el pontífice en una entrevista al periódico La Repubblica.
Precisó que los mayores necesitan “cuidados y compañía”, mientras que a los jóvenes les hacen falta “trabajo y esperanza”.
En cuanto a sus planes de reformar la Iglesia, Francisco se centró en la necesidad de cambios en la Curia romana.
“Se ocupa de los intereses del Vaticano y olvida el mundo que le rodea. No comparto esta visión y haré de todo para cambiarlo”, afirmó Francisco.
Agregó que “los jefes de la Iglesia han sido a menudo narcisistas, adulados por sus cortesanos”.
La entrevista del pontífice se publicó en la prensa italiana precisamente el día de la primera reunión del Consejo de los ocho cardenales nombrados por el papa para que le asesoren en la modernización de la Iglesia.
