El jefe del Servicio ruso de Migración, Konstantín Romodánovski, descartó hoy la posibilidad de una amnistía para los inmigrantes ilegales en Rusia.
“Puedo decirles de forma inequívoca que no habrá amnistía para los que vagan con fines desconocidos e infringen nuestras reglas. Es más, las nuevas normativas les cierran la entrada”, declaró Romodánovski a RIA Novosti.
El funcionario recordó que, en lo que va de año, Migración denegó la entrada a 215.000 personas.
Al mismo tiempo, señaló que “ya se decretó una especie de amnistía en 2010, con la introducción de patentes que permiten a inmigrantes trabajar para personas físicas”.
“Se trata de más de tres millones de personas que antes permanecieron en la sombra”, dijo.
La propuesta de una amnistía para los inmigrantes ilegales fue presentada el martes por el Defensor del Empresario, Borís Titov.
El número de inmigrantes ilegales en Rusia se estima en tres millones, según la estadística oficial, o hasta 12 millones, según los datos no oficiales.
“Ninguna redada sirve para cazar esta mano de obra, varios millones de trabajadores que nuestra población se empeña en ignorar a su lado”, escribió Titov en un blog publicado en la web de la emisora Ejo Moskvi.
La legalización de los indocumentados, según él, contribuirá al fisco, pues “inmigrantes legales tributan y gastan en Rusia una parte considerable de su salario; apenas un 36% de lo que cobran se va del país”.
