El grupo rebelde sirio Mártires de Yarmouk, que ya antes había secuestrado cascos azules en Siria, reivindicó hoy el secuestro de cuatro efectivos de la misión de la ONU perpetrado en los Altos del Golán, comunicaron medios internacionales.
Los secuestrados son ciudadanos de Filipinas, según la televisión libanesa.
El Consejo de Seguridad de la ONU declaró que las operaciones de combate que el Ejército y la oposición de Siria libran en esta zona minan el régimen del cese del fuego, peligran la seguridad de la población local y crean riesgo para el personal de Naciones Unidas.
También recordó la detención en marzo pasado de 21 militares de la misión de la ONU “por elementos armados de la oposición siria”.
El Consejo de Seguridad exhortó a las partes en conflicto a respetar a los cascos azules y no dificultar su labor.
La misión de la ONU se sitúa en una zona tapón creada para separar las tropas israelíes y sirias tras la guerra arabo-israelí de 1973. Los Altos del Golán se encuentran en la frontera entre Israel, Líbano, Jordania y Siria y son un territorio disputado por Israel y Siria.
