Rusia espera que las nuevas autoridades georgianas opten por normalizar relaciones con los países limítrofes, incluidas Abjasia y Osetia del Sur, declaró hoy el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov.
El bloque opositor Sueño Georgiano ganó los comicios parlamentarios que se celebraron en Georgia la semana pasada.
“Esperamos que las nuevas autoridades georgianas emprendan el camino de normalización de relaciones con todos sus vecinos, incluidas Abjasia y Osetia del Sur. Por nuestra parte, no sostendremos negociaciones con Georgia, ni con ningún otro país, sobre el destino de dichas repúblicas, porque fueron sus pueblos que lo determinaron”, dijo Lavrov.
Rusia, a la hora de reconocer la independencia de Abjasia y Osetia del Sur, estaba convencida de que era el único modo de garantizar la supervivencia de sus pueblos, añadió.
El canciller también dijo confiar en que las nuevas autoridades georgianas aplicarán la política de normalización con respecto a Rusia.
Moscú y Tbilisi no tienen relaciones diplomáticas actualmente. Georgia las rompió tras reconocer Rusia la soberanía de Abjasia y Osetia del Sur, dos autonomías que formaban parte de Georgia, pero venían insistiendo en independizarse desde antes de la desintegración de la URSS.
El ejército de Georgia lanzó una ofensiva contra la república autoproclamada de Osetia del Sur el 8 de agosto de 2008.
Rusia envió tropas a la región para proteger a los habitantes de Osetia del Sur, muchos de los cuales tenían nacionalidad rusa, y expulsó las tropas georgianas tras cinco días de hostilidades. El 26 de agosto de 2008, Moscú reconoció la independencia de Osetia del Sur y de Abjasia.
