Las autoridades francesas tomarán medidas decididas para erradicar las manifestaciones de la agresividad en los suburbios problemáticos, declaró este martes el presidente de Francia, Francois Hollande.
“Las autoridades movilizarán todos los recursos disponibles para luchar contra cualquier manifestación de la violencia”, dijo.
La noche pasada, un centenar de jóvenes agresivos prendieron fuego a un jardín de infancia y un centro deportivo, quemaron unos quince autos en Amiens, norte de Francia. Quedaron heridos 16 de los 150 policías atraídos para eliminar los desórdenes. Anteriormente, unos choques con la policía de menores proporciones ocurrieron en Tolosa (suroeste del país).
En relación con eso Hollande señaló que la garantía de la seguridad es una obligación prioritaria de las autoridades. Informó que el ministro del Interior de Francia, Manuel Valls, ya se dirigió a Amiens.
El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, a su vez dijo que los delincuentes hicieron un sustancial daño a la infraestructura de la ciudad, atacaron a bomberos y a policías. “El Gobierno tomará medidas para castigar a los culpables”, prometió.
Los choques con la policía se registran desde hace unos meses en Amiens. Los últimos sucesos fueron reacción a la detención de un automovilista. Los disturbios continuaron hasta el amanecer. Ninguno de sus participantes fue arrestado.
