La agencia espacial estadounidense NASA desclasificó el año pasado al menos 200 de sus proyectos, buscando ampliar la colaboración con el sector privado ante recortes en la financiación pública, reveló el responsable de Planificación Avanzada de la entidad, Steven Gonzalez.
Según afirmó Gonzalez en declaraciones a RIA Novosti, estos diseños, que se conciben en la NASA y pasan prueba en el espacio, arrasan en la industria privada estadounidense.
Entre los diseños que han tenido mayor éxito se encuentra la tecnología para obtener oxígeno y dióxido de carbono del suelo lunar, que se utiliza por petroleras estadounidenses para extraer gas mediante la llamada técnica de fractura hidráulica, indicó el portavoz de la NASA.
Según explicó, la tecnología se desarrolló originalmente para el proyecto de una base lunar permanente y habitada en la Luna que la NASA preveía establecer en el satélite terrestre a partir de 2020.
Otro buen ejemplo de la cooperación comercial entre la NASA y el sector privado es el Robonaut 2, un robot astronauta diseñado por la agencia y lanzado en 2011 a la Estación Espacial Internacional (ISS).
Actualmente, el diseño se está adaptando para ser utilizado en las plantas del gigante automotriz General Motors.
Por su parte, el programa Direct Routes, desarrollado en los laboratorios de la NASA y adquirido por la compañía Boeing, permite optimizar el tráfico aéreo ahorrando hasta 50 millones de dólares anuales.
El presupuesto de la NASA alcanzó en 2010 una cifra histórica de 18.700 millones de dólares, aunque sólo un año después fue recortado a 18.500 millones de dólares y se situará en 17.700 millones entre 2012 y 2013, según está previsto.
El presidente de EEUU, Barack Obama, reconoció anteriormente que el Gobierno no puede continuar financiando proyectos espaciales con fondos públicos, por lo que propuso a la NASA buscar colaboración del sector privado.
