La compañía Olympics Delivery Authority (ODA), encargada de construir las nuevas instalaciones e infraestructuras para los próximos Juegos Olímpicos de Londres, obligó a sus operarios a desayunar gachas de avena para conseguir que rebajaran de peso y evitar así accidentes en las obras, informó el diario Evening Standard.
Según Lawrence Waterman, responsable del Departamento de Salud y Seguridad de la ODA, entre los 12.000 operarios contratados para las obras del estadio y la villa olímpica, uno de cada tres tenía sobrepeso y hasta un 29% hipertensión arterial por alimentación incorrecta.
Además, algunos de los ellos padecían obesidad diagnosticada por un médico.
Uno de los empleados de las obras llegó a reconocer que la mayoría de sus compañeros eran “chicos muy grandes”, ninguno de los cuales reparaba en su alimentación.
Al mimos tiempo, la mayoría de accidentes laborales registrados en las obras de instalaciones olímpicas de Londres tenían como causa el sobrepeso de los operarios, así como se debían a que muchos de ellos no desayunaban después de haber tenido una copiosa cena de comida rápida, indicó el jefe de Salud y Seguridad de la ODA.
Afirmó además que faltando una hora para el almuerzo las obras prácticamente se paraban porque los operarios “no podían pensar en otra cosa que no fuera lo que iban a comer”.
Para hacer que perdieran de peso, la ODA decidió ofrecerles un desayuno diario de gachas de avena, un plato típico inglés caracterizado por ser muy sano, por tan sólo una libra esterlina.
