Las bolsas europeas siguen experimentando fuertes caídas durante varias jornadas consecutivas.
Los principales índices bursátiles europeos han bajado un 3%. La situación en las bolsas de Asia y EEUU no es mucho mejor. El valor de acciones en los mercados asiáticos y estadounidenses ha caído un 1%.
Los expertos atribuyen las fuertes bajas al miedo de que los Gobiernos europeos no estén aplicando medidas suficientes para prevenir que las principales economías caigan en recesión.
La inestabilidad política en Rusia tras las elecciones parlamentarias del pasado 4 de diciembre también provoca caída en las bolsas rusas. El pasado 12 de diciembre, las bolsas de Europa, Asia, Rusia y EEUU cerraron con fuertes bajas, de entre el 3,4 al 3,8%. El FTSE Mib italiano cayó el 3,79%; el alemán DAX 30 perdió el 3,36%; el francés CAC 40, el 2,61%, y el británico FTSE, el 1,83%.
Al cierre de la sesión bursátil del 12 de diciembre, los principales índices rusos cayeron más de un 3%. El índice Micex descendió un 3,32%, y el RTS cayó el 3,31%. Ambas bolsas rusas renovaron sus mínimos bimestrales.
Los índices bursátiles de EEUU y Asia también experimentaron un gran descenso.
Las bolsas estadounidenses cerraron en rojo. El índice Nasdaq cayó el 1,31%, el S&P 500 perdió el 1,49%.
Las acciones coreanas, japoneses, así que de Australia y Singapur cayeron del 1 al 1,5%.
Agencias de calificación de riesgos desploman las bolsas
Los índices bursátiles bajaron tras la declaración de las calificadoras internacionales de riesgos crediticios, Moody's Investors Service y Standard&Poor's, que las calificaciones de los países de la eurozona pueden bajar en caso de que sus Gobiernos sean incapaces de aplicar medidas concretas para superar la crisis de deuda.
De este modo las agencias arriba mencionadas reaccionaron a los resultados de la cumbre de la UE celebrada a finales de la semana pasada en Bruselas. “La cumbre no ha cambiado nada. Se decidió continuar aplicando las medidas de apoyo a los bancos europeos por parte del Banco Central Europeo (BCE) y haciendo recortes presupuestarios”, dijo Dan Morris, experto del holding financiero JP Morgan Chase en Londres.
Consecuencias de la cumbre de la UE
“Las bolsas se desploman, porque los inversores no saben cuál será la suerte de las deudas de Grecia e Italia y de la eurozona en general” dijo a RIA Novosti el experto de la inversora rusa Troika Dialog, Antón Struchenevski.
A pesar de que los líderes de la UE reunidos en Bruselas encontraron una fórmula de compromiso sobre las vías para salir de la crisis, no han acordado todavía los detalles concretos, lo que preocupa a los inversores, moviéndolos a vender acciones.
Según Vladimir Braguin, experto de la compañía gestora Alfa-Capital, las decisiones tomadas en Bruselas no pueden hacerse realidad en breve. “Para efectuar una integración fiscal, por ejemplo, se necesitan varios meses o años, porque deben aprobarse las respectivas leyes y diseñarse los mecanismos”, afirma Braguin.
Navidad como factor de riesgo
Quedan unas dos semanas para la Navidad, factor que también ejerce su influencia en las bolsas. “Todos entienden que se aproxima el período de baja liquidez en el mercado, cuando será difícil vender acciones, y es un factor de riesgo adicional”, subraya Braguin.
Por eso los inversores se abstienen actualmente de invertir, prefiriendo vender acciones con tal de continuar su actividad ya en el año nuevo, cuando se aclare la situación en el mercado.
La inestabilidad política en Rusia preocupa a los inversores
“La inesperada inestabilidad política en Rusia también contribuyó a la caída del mercado de valores”, dijo Antón Struchevski.
Los inversores occidentales consideraban que el sistema político ruso era muy estable, pero las elecciones parlamentarias celebradas el pasado 4 de diciembre demostraron que no es así.
Según Struchevski, es un nuevo factor de riesgo. “Los inversores tienen dudas respecto a la estabilidad de la economía rusa, lo que conlleva a la caída en las bolsas, a pesar de buenos indicadores fundamentales”, destaca el experto.
Los expertos señalan que la situación en los mercados de valores difícilmente mejorará en lo que resta de año. Según Struchevski, “los inversores prefieren tener en sus manos el dinero real, lo que aumenta la presión en el euro y las divisas nacionales, como el rublo”.
Pero también hay noticias positivas. “Ahora es el mejor período para los inversores dispuestos a invertir en las acciones por un plazo de entre 3 y 10 años”, afirma Braguin.
El estado financiero de muchas empresas es, en realidad, mucho mejor que lo califican los expertos, explica Braguin. “El problema principal consiste en que muchos inversores prefieren evitar los riesgos a corto plazo y vender sus acciones”, añadió.
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI
