Rusia tomará medidas de respuesta al escudo antimisiles de EEUU y la OTAN en Europa (EuroDAM), si las partes fracasan en llegar a un consenso en los próximos 8-10 años, anunció hoy el presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, durante una reunión con sus partidarios.
“Se trata de que si nuestros socios y nosotros no logramos consenso en los próximos 8-10 años respecto a algunos aspectos (del DAM), nos veremos obligados a tomar ciertas medidas graduales en respuesta al escudo antimisiles en Europa”, dijo.
Según el mandatario ruso, la respuesta rusa también será gradual y la primera etapa de la misma ya se realizó al entrar en servicio un radar ruso de alerta temprana en Kaliningrado, exclave ruso situado entre Lituania y Polonia.
“Nuestra estrategia es totalmente pacífica pero al mismo tiempo nos permitirá contrarrestar el respectivo potencial de la Alianza Atlántica”, dijo Medvédev.
El presidente de Rusia afirmó que es de todas maneras poco deseable que a finales de esta década cualquier dirigente de la Federación de Rusia tenga que adoptar la decisión, “ya definitiva”, sobre el emplazamiento del armamento nuclear en las fronteras del país, tanto en Kaliningrado como en el sur y otras regiones.
Medvédev subrayó que aún existe la posibilidad para lograr un consenso con EEUU.
“Pero al mismo tiempo, hay que dejarlo muy claro que si la situación evoluciona como ahora, tendremos que responder”, afirmó.
Dmitri Medvédev anunció el pasado 23 de noviembre un conjunto de medidas en respuesta el escudo antimisiles de la OTAN en Europa.
Además de la puesta en servicio del radar de alerta temprana en Kaliningrado, efectuada el pasado 29 de noviembre, la estrategia prevé reforzar la defensa aeroespacial de su arsenal estratégico nuclear y equipar los misiles balísticos de sistemas capaces de esquivar el escudo antimisiles.
Si EEUU y la OTAN pasan por alto sus preocupaciones, Rusia, según Medvédev, emplazará en el oeste y el sur de su territorio modernas armas ofensivas capaces de destruir el componente europeo del sistema de defensa antimisil.
El mandatario ruso amenazó también con el abandono del Tratado START, principal resultado del reinicio de relaciones entre Moscú y Washington.
Al mismo tiempo, el jefe de Estado afirmó que Rusia está dispuesta a dialogar con EEUU y la OTAN para arreglar las discrepancias sobre el DAM, uno de los asuntos más espinosos en las relaciones entre Rusia y el Occidente.
