Las sospechas de los médicos egipcios respecto al turista alemán que supuestamente padecía de la peligrosa infección intestinal provocada por E. coli, no llegaron a confirmarse, anunció el jefe del departamento de epidemiología del Ministerio de Sanidad de Egipto, Muhammad Hanidi.
“Los análisis resultaron negativos. El turista no fue infectado con la bacteria E. coli que provocó el brote de infección intestinal en Europa”, dijo al precisar que el enfermo padecía de una “inflamación del intestino delgado”.
El turista alemán de 34 años fue ingresado el pasado martes en el hospital de la ciudad egipcia de Hurgada por sospecha de contagio de la infección intestinal provocada por la E. coli enterohemorrágica (EHEC) que ya se cobró al menos 20 vidas en Europa. Sin embargó, hacia la noche del mismo día mejoró y decidió trasladarse a un hospital privado sin esperar los resultados de los análisis.
Posteriormente fue descubierto por la policía y el miércoles le expulsaron a Alemania acompañado de médicos.
La infección intestinal que ya causó al menos 20 víctimas mortales en Europa, fue registrada inicialmente en el norte de Alemania. Según la Organización Mundial de la Salud, la infección se extendió a 10 países europeos.
El brote de la infección fue provocada por la bacteria Escherichia coli enterohemorrágica (EHEC). La bacteria E. coli puede estar presente en el intestino de humanos y animales homeotermos. La mayoría de sus cepas son inocuas, pero la EHEC puede provocar graves enfermedades.
Los males provocados por la EHEC van acompañados de diarrea con sangre, fiebre y náuseas. La mayoría de los pacientes reconvalecen en el transcurso de 10 días, sin embargo, dichas enfermedades pueden implicar un peligro para la vida de las personas ancianas o niños de poca edad.
