Moscú, 25 de mayo, RIA Novosti. El Patriarca Kiril, máximo jerarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa, inauguró hoy la primera sesión del Concilio Mundial del Pueblo Ruso, dedicado a los problemas de la educación nacional y en su discurso calificó de hazaña el oficio del pedagogo y exhortó a todos los maestros y profesores dar promesas de llevar una vida casta y servir de ejemplo a sus alumnos.
"La pedagogía es una materia ascética, es un trabajo vinculado con una hazaña y abnegación. Los pedagogos consagran su energía y hasta su vida que ya no les pertenece", dijo el patriarca durante la inauguración del evento en la Catedral de Cristo el Salvador en Moscú.
El patriarca Kiril destacó que al igual que los médicos presentan el Juramento Hipocrático, los maestros y profesores "deben dar promesas de llevar una vida casta, proteger la santidad del matrimonio y servir de ejemplo" para sus discípulos, ya que según considera, el ejemplo personal es el principal instrumento de influencia pedagógica.
Asimismo, el patriarca afirmó que "una persona indiferente, fría, degradada moralmente o guiada por su propio interés no puede ser un buen pedagogo".
El Concilio Mundial del Pueblo Ruso, fundado en 1993, es el mayor foro social internacional que integra a miembros del gobierno, representantes de los todos los poderes del Estado, líderes políticos y sociales, altos clérigos de religiones tradicionales, militares, representantes de cultura, ciencia y educación, delegados de las comunidades de compatriotas de las ex repúblicas soviéticas y del extranjero.
