Tokio, 10 de marzo, RIA Novosti. Un árbol Gingko de más de 800 años fue derribado a causa de un fuerte viento en un santuario sintoísta de la ciudad nipona de Karakura, informó hoy la televisión local.
"Por la mañana oímos un ruido terrible. Cuando nos acercamos al árbol, ya se había caído. Estamos conmocionados por lo ocurrido", reconoció un clérigo del templo.
El árbol, de 30 metros, se consideraba sagrado en el templo sintoísta y durante siglos recibía cuidados especiales.
Según la leyenda, hace 800 años cerca del árbol fue asesinado uno de los gobernantes de Japón. Dicen, que su homicida se cobijó en la sombra de la planta gigante para pasar desapercibido y poder alcanzar a su presa.
Tras la caída del árbol, se comprobó que lsu tronco estaba prácticamente hueco por dentro, lo que no pudo resistir la fuerza del viento.
De acuerdo a la religión sintoísta, todo elemento natural es divino, pero el árbol goza de especial relevancia, ya que se le asocia con la sabiduría milenaria.
