Whistler (Canadá), 18 de febrero, RIA Novosti. La pista de luge y bobsleigh de Whistler tristemente célebre por la muerte del deportista georgiano Nodar Kumaritashvili, sigue siendo peligrosa para los deportistas después que hoy se volcaran trineos de al menos cuatro equipos nacionales durante el entrenamiento.
El piloto australiano de bobsleigh, Duncan Harvey, incluso tuvo que ser hospitalizado, comunica la web NEWSru.ua.
Son muchos los deportistas que critican la pista de Whistler. La competidora australiana de luge, Hannah Campbell-Pegg, que a duras penas logró controlar su trineo y no salirse de la pista un día antes de la muerte del atleta georgiano, comentó que los olimpistas se jugaban la vida.
Cuando el estadounidense Tony Benshoof ensayó la pista, pensó que la diseñó un suicida. El propio Nodar Kumaritashvili había advertido que la pista le daba miedo, y sobre todo uno de sus virajes.
Entretanto, los comisarios de la Federación Internacional de Luge (FIL) han realizado una investigación y afirmaron que el accidente mortal no tenía que ver con un supuesto error en el diseño de la pista, sino que fue culpa del propio deportista georgiano que no supo controlar su trineo.
