En el período de la crisis, los moscovitas empezaron a recurrir con mayor frecuencia a los servicios de arreglo de zapatos, dijo a los periodistas hoy el jefe del departamento capitalino del mercado de consumo, Vladímir Malishkov.
"Muchas personas prefieren hoy día lavar y reparar ropa en casa, en vez de ir a tintorerías y lavanderías. Pero la demanda de los talleres de reparación de zapatos ha aumentado", señaló él. "La gente está ahorrando, por lo que en vez de adquirir zapatos nuevos, manada a reparar los viejos", añadió.
Por Serguei Yolkin