Washington, 25 de noviembre, RIA Novosti. Tras cinco días de fallidos intentos, los astronautas norteamericanos que trabajan en la Estación Espacial Internacional (ISS) consiguieron poner en marcha el equipo que convierte la orina en agua potable, anunció hoy un portavoz de la NASA.
Los astronautas no lograban hacer funcionar el equipo, y los responsables del vuelo del transbordador Endeavour, acoplado en estos momentos a la ISS, decidieron prorrogar un día más la misión de la nave.
Incluso se pensó devolver el equipo a la Tierra para ver por qué no quería funcionar.
Ahora, cumplida la misión, el Endeavour se desacoplará del complejo orbital el viernes para aterrizar el domingo.
El equipo para convertir orina en agua potable ha costado 154 millones de dólares y es de gran importancia para los ocupantes de la ISS que muy pronto serán seis.
Las primeras muestras del agua obtenida de la orina serán enviadas a la Tierra para su examen. Si el agua resulta completamente potable, los tripulantes de la ISS serán autorizados para emplearla.
