Moscú, 5 de noviembre, RIA Novosti. El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, y el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, quien llega a Moscú para participar en las consultas ruso-italianas, estudiarán el jueves los actuales problemas internacionales, incluida la elaboración de un nuevo sistema de seguridad europea, informó hoy una fuente del Kremlin.
"Ellos tratarán, en primer lugar, la edificación de un nuevo sistema de seguridad colectiva en Europa; las garantías de la seguridad y estabilidad en la región del Cáucaso; las relaciones de Rusia con la Unión Europea y la OTAN; la necesidad de desarrollar una nueva arquitectura financiera mundial considerando la crisis global, así como unos temas relacionados con la presidencia de Italia en G-8 en 2009", dijo.
La iniciativa de firmar un tratado de seguridad europea se debe a Dmitri Medvédev, quien lo había planteado mucho antes de que Georgia agrediera a Osetia del Sur. A la luz de la crisis que se produjo en el Cáucaso en agosto de este año, la elaboración del nuevo sistema de seguridad adquirió una especial actualidad.
Las tropas georgianas destruyeron la capital de Osetia del Sur, Tsjinvali, en la noche del 7 al 8 de agosto, matando a más de 1.600 civiles. Como respuesta a ello Rusia llevó a cabo una operación de imposición de la paz en Georgia y protección de los ciudadanos de Rusia residentes allí. Rusia reconoció la independencia de Osetia del Sur y Abjasia el 26 de agosto.
El primer ministro italiano fue uno de los poco dirigentes occidentales en declarar en aquel entonces que Rusia respondió a una provocación.
Rusia y la Unión Europea acordaron hasta el momento proseguir consultas extraoficiales sobre la concertación del tratado en cuestión. Medvédev opina que debería organizarse un debate en torno a este tratado con participación no sólo de la UE sino también de EEUU, Canadá, OTAN, CEI y la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (la integran Armenia, Bielorrusia, Kazajstán, Kirguizistán, Rusia, Tayikistán y Uzbekistán).
En opinión del presidente ruso, el nuevo tratado deberá recoger los siguientes principios básicos: el cumplimiento concienzudo de los compromisos internacionales asumidos, el respeto a la soberanía, la integridad territorial y la independencia política de los Estados; la inadmisibilidad del empleo de la fuerza o la amenaza de emplearla en relaciones internacionales y las garantías de una igual seguridad para todos los Estados.
