TeleSUR
"Tengan por seguro, vamos a defender la democracia, vamos a defender el proceso de cambio y sobre todo vamos a garantizar la unidad del país", afirmó, al referirse a los hechos de violencia en Pando, que se saldaron con cuatro muertos y veinte heridos.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, advirtió este jueves que "la paciencia tiene un límite", al referirse a la violencia desatada en el país por grupos opositores a su gobierno, que causó al menos cuatro muertos y veinte heridos en el noroccidental departamento de Pando.
"Vamos a tener paciencia, prudencia, como siempre tratar de evitar la confrontación, vamos a aguantar, pero la paciencia tiene un límite, de verdad", sentenció el mandatario durante la entrega de una obra civil en la ciudad de La Paz.
Morales hizo alusión a los saqueos los últimos tres días de instituciones públicas y ocupaciones de campos petroleros en regiones del sur, centro y oriente del país, en los que grupos de choque afines a los líderes opositores cerraron ductos de bombeo de gas a Brasil y Argentina.
El mandatario reiteró que "es obligación del Gobierno defender la democracia y la unidad del país".
Reveló además que se reunió con organizaciones sociales, dirigentes de la unitaria Central Obrera Boliviana (COB) y dirigentes campesinos e indígenas "que derrotaron tantas dictaduras con sus movilizaciones".
"Tengan por seguro, vamos a defender la democracia, vamos a defender el proceso de cambio y sobre todo vamos a garantizar la unidad del país", afirmó.
El jefe de Estado acusó una vez más a los prefectos y líderes opositores de las cinco regiones de la "media luna" de impulsar un "golpe de Estado cívico-prefectural" desde esos departamentos.
Violencia deja muertos y heridos
Al menos cuatro muertos y veinte heridos se registraron este jueves en el departamento de Pando, durante enfrentamientos entre los autodenominados "cívicos" de ultraderecha y los campesinos que apoyan al proceso de cambios emprendido por el gobierno del presidente Evo Morales.
Los campesinos tenían programado un ampliado departamental en la población del Porvenir, ubicada a 30 kilómetros de Cobija, para definir medidas contra la violencia generada por grupos de choque de las regiones de la "media luna".
El ejecutivo de los campesino de Pando, Antonio Moreno, dijo que el sector campesino decidió salir a defender la democracia y evitar el golpe de Estado cívico-prefectural que comenzó el martes con la toma violenta de entidades públicas.
Por su parte, el viceministro de Régimen Interior, Rubén Gamarra, responsabilizó a los prefectos y cívicos del denominado Consejo Nacional Democrático (Conalde) de las muertes, violencia y saqueos que se están produciendo en el país.
Gamarra dijo en una conferencia de prensa que los primeros reportes confirman totalmente la muerte de un ingeniero de la Prefectura de Pando y apuntan a que dos campesinos y un concejal de la localidad de Porvenir también pueden haber fallecido en el choque.
Gamarra precisó que el ingeniero fallecido es Pedro Oshiro, funcionario de la Prefectura de Pando, cuya identidad fue establecida plenamente.
Los otros tres serían un concejal y dos campesinos, uno de los cuales fue atropellado por un vehículo de la Prefectura y el otro fue "apaleado".
"No podemos seguir en este escenario de violencia", dijo Gamarra, quien reclamó a la justicia acciones para frenar los enfrentamientos.
En cinco de los nueve departamentos de Bolivia se producen protestas contra el gobierno por el rechazo a la nueva Constitución y por la recuperación de fondos públicos.
Suministro de gas será normalizado
El ministro de Finanzas de Bolivia, Luis Alberto Arce, expresó este jueves que el suministro de gas boliviano a Brasil, que disminuyó unos tres millones de metros cúbicos diarios a causa del atentado a un gasoducto, será normalizado en 10 a 15 días.
"El titular de Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Bolivia (YPFB) informó de un atentado a un gasoducto que produjo esa disminución de un 10 por ciento del abastecimiento diario a Brasil. Reparar esos daños tomará un plazo de entre 10 y 15 días", dijo Arce en una conferencia de prensa en Brasilia.
Según el funcionario, el atentado al gasoducto que abastece a Brasil "produjo daños" y le causa a Bolivia un perjuicio de 8 millones de dólares por día.
Por eso, acotó, "el gobierno del presidente Evo Morales tomará todas las medidas necesarias para garantizar el suministro de gas a Brasil" en el volumen acordado en los contratos, de unos 31 millones de metros cúbicos diarios.
Por su parte, el embajador de Bolivia en Brasil, Mauricio Dorfler, apuntó que "en 35 años de acuerdos entre los dos países por abastecimiento de gas no ha habido un día en que Bolivia haya dejado de cumplir sus compromisos".
Según Dorfler, "no se trata de que Bolivia esté dejando de cumplir sus compromisos con Brasil. Hubo un atentado y eso será resuelto en la brevedad posible".
El ministro brasileño de Minas y Energía, Edison Lobao, dijo que su gobierno prepara "planes de contingencia" para garantizar el abastecimiento de gas a Sao Paulo, el mayor consumidor de energía de Brasil.
