St. John´s, 1 de julio, PL, para RIA Novosti. Los jefes de gobierno de la Comunidad del Caribe (CARICOM) comienzan hoy a llegar a esta ciudad para una cumbre entre cuyos análisis principales sobresale el aumento de las importaciones de alimentos.
La cita de los líderes de la región, desde mañana y hasta el viernes en esta capital, examinará el alza registrada con las importaciones caribeñas que alcanzaron los tres mil millones de dólares en 2007 y aumentarán significativamente este año.
En la cumbre presidencial sobre seguridad alimentaria convocada por Nicaragua en mayo pasado, el presidente de Haití, René Préval, llamó a la unidad del Caribe y América Latina para enfrentar la crisis, con énfasis en el desarrollo de la producción nacional como única respuesta válida.
No podemos permanecer pasivos y ver cómo la alimentación de nuestros pueblos depende de lo que producen los países ricos, advirtió e hizo un llamado a la solidaridad de los pueblos y a desarrollar la producción de alimentos en las naciones de la región.
Préval agradeció a CARICOM por dar a su país unos 10 millones de dólares para enfrentar la crisis de alimentos y reconoció el apoyo de Venezuela, con la entrega de 15 mil toneladas de urea, 50 tractores agrícolas y otros recursos para impulsar la producción de alimentos.
El ministro de Agricultura de Jamaica, Christopher Tufton, se ha referido a la importancia de los alimentos para la existencia humana y "aunque sólo sea para eso, esta crisis debe redefinir la importancia estratégica de la agricultura para galvanizar la acción."
"Pequeños países importadores netos de alimentos como Jamaica son particularmente vulnerables, ya que ni tenemos los recursos para continuar importando alimentos a estos altos precios, ni la capacidad para incrementar rápidamente la producción de alimentos en el corto plazo," dijo Tufton.
El ministro argumentó que la adaptación al cambio climático ahora debe traducirse en políticas y programas agrícolas, en tanto observó que Jamaica ha sido azotada por al menos seis episodios climáticos severos en los últimos cinco años, lo que ha resultado en pérdidas para el sector agrícola de casi 200 millones de dólares.
James Moss-Solomon, jefe de la fuerza de tarea del Foro de Inversiones Agrícolas de CARICOM refirió en ese evento realizado en junio en Georgetown, Guyana, la necesidad de obtener asistencia de América Latina, particularmente de Guyana, Trinidad y Tobago y otros países representados en el Foro.
La Comunidad, dijo, puede aprender de ellos y están dispuestos a ayudar. La asistencia puede estar en el área de entrenamiento en servicios de extensión y mediante acuerdos de cooperación técnica.
Lester Brown, presidente del Instituto Worldwatch escribió en su libro de 2005 Outgrowing the Earth, que "la agricultura será una de las oportunidades de negocios más importantes del Siglo 21".
En enero de 2007 Lester Brown, ahora presidente del Earth Policy Institute (Instituto de Política de la Tierra), escribe sobre la Revolución Medioambiental como sigue: "Restructurar la economía global de acuerdo con los principios de la ecología representa la mayor oportunidad de inversión en la historia. A escala, la Revolución Medioambiental es comparable a las Revoluciones Agraria e Industrial que la precedieron."
Argentina, Venezuela, Cuba y otras naciones latinoamericanas hablaron en nombre del Sur en la Conferencia de Alto Nivel de la FAO sobre Seguridad Alimentaria realizada en Roma. Criticaron con severidad la falta de voluntad política de las naciones industrializadas para resolver el hambre inaceptable que afecta a 862 millones de personas en todo el mundo.
La declaración final de la cita llama a incentivar la producción de alimentos e invertir grandes sumas en el sector agrícola, pero al mismo tiempo no establece medidas concretas vinculantes de los signatarios a tomar acciones.
El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon afirmó que el mundo necesita producir más alimentos y que esta producción debe aumentar en 50 por ciento para el 2030 a fin de enfrentar la demanda creciente.
La declaración de Roma señala: "Hay una urgente necesidad de ayudar a los países en desarrollo y las naciones en transición a expandir la producción agrícola y de alimentos, así como incrementar las inversiones en la agricultura, el comercio agrícola y el desarrollo rural, tanto de fuentes públicas como privadas."
El Director General de la FAO Jacques Diouf afirmó que la actual crisis mundial de alimentos ha tenido ya "consecuencias trágicas políticas y sociales en distintos países" y podría aún más hacer peligrar la paz y la seguridad mundiales."
Además expresó que "la solución estructural del problema de seguridad alimentaria en el mundo está en el incremento de la producción y la productividad en los países de bajos ingresos y déficit en alimentos."
