En las consultas sobre seguridad que EEUU y Azerbaiyán celebrarán en Bakú el próximo mes de julio se examinará la posibilidad de ingreso de Azerbaiyán en la OTAN, anunció ayer Anne Dersi, embajadora norteamericana en esta república centroasiática, escribe en su edición de hoy el diario ruso Nezavisimaya gaceta.
La embajadora emitió esta declaración en vísperas de la visita del presidente ruso, Dmitri Medvédev a Bakú, fijada para el 3 de julio.
Lo dicho por Anne Dersi provocó asombro en Bakú. "Azerbaiyán no se da prisa por tomar la decisión sobre el ingreso en la OTAN, si bien se desarrolla con dinamismo la cooperación con la Alianza", manifestó el embajador azerbayano ante la OTAN, Kamil Jasiev.
"Las autoridades de Azerbaiyán jamás han exteriorizado el deseo de ingresar en la OTAN", indica el politólogo Rasim Musabekov. Según sus palabras, la aspiración a obtener el rango de miembro pleno de la Alianza podría traer consecuencias más graves para Azerbaiyán que para Georgia. "En el caso de Georgia, sólo Rusia se opone a su ingreso en la OTAN, pero en el caso de Azerbaiyán, se le sumará Irán. No se debe olvidar asimismo que se mantiene congelada la guerra con Armenia", explica el experto. A su juicio, el ingreso en la OTAN no proporcionará beneficios algunos a Azerbaiyán.
"No hay nada raro en los procesos que se operan en Azerbaiyán. Son naturales y difícilmente puedan causar sorpresa -sostiene Alexei Malashenko, experto del Centro Carnegie de Moscú-. En el caso de que Azerbaiyán ingrese en la OTAN, aparecería un nuevo factor muy interesante en el arreglo del conflicto de Alto Karabaj."
