- Sputnik Mundo
Internacional
Todas las noticias mundiales en un mismo portal informativo. Sigue de cerca lo que pasa en diferentes regiones del planeta.

La industria militar rusa dio al traste con los pedidos de Defensa. Nezavisimaya Gazeta

Síguenos en

La campaña de adjudicación de los pedidos de Defensa para 2008-2010 ha fracasado. Un tercio de los contratos previstos siguen sin firmar a pesar de que el Gobierno ruso pidió completar este trabajo para el 1 de marzo, reconoció el martes Serguei Ivanov, vicejefe primero del Gabinete. Ivanov culpa a las empresas de la industria militar, que inflan los precios sin miramientos algunos, pero los directores industriales califican esta acusación de infundada.

 

El volumen total de los pedidos colocados "no supera el 65%", admitió Ivanov, al calificar de "insatisfactorio" el avance de esta campaña en algunos terrenos. El problema, según él, se refiere básicamente a los contratos a largo plazo. "La causa fundamental de esta situación es que los ejecutores inflan el importe contractual a la luz de la posible subida de los precios de materias primas, materiales y componentes", piensa el vicepresidente del Gobierno. En opinión de Ivanov, las empresas desaprovechan los mecanismos de compensación existentes en esta materia.

Ejecutivos empresariales, entretanto, dan a entender que estas fórmulas de compensación parecen una broma. El Ministerio ruso de Desarrollo Económico y Comercio, por ejemplo, recomendó al de Defensa considerar este año una subida del 8% en el renglón de metales. Los productos de cinco principales grupos siderúrgicos de Rusia - Evraz, Severstal, Mechel, MMK y NLMK - subieron de precio en un 40-45% solamente en el mes de abril. Así las cosas, es problemático que las empresas de la industria militar rusa se pongan en masa a firmar en mayo contratos sobre las condiciones propuestas por Defensa.

La situación es realmente desalentadora: ninguna de las empresas de defensa en la zona de Ekaterimburgo, por ejemplo, ha cumplido al 100% el plan de contratación de pedidos públicos. En el caso de Uralvagonzavod, el grado del cumplimiento es del 80%, y en el de Uraltransmash y Vektor, del 50%. Algunas asociaciones gremiales lo atribuyen a la falta de un sistema bien definido en lo que concierne a la celebración de concursos para la adjudicación de los pedidos de Defensa. La mayoría de las empresas abordan las obras sin esperar a que se cierren primero los respectivos contratos, por lo cual se ven obligadas a solicitar créditos cuyos intereses, junto con la inflación, acaban absorbiendo a la larga todo el margen. También es un factor a tomar en cuenta a la hora de acordar el contrato aunque Defensa se inclina a pensar que los contratistas inflan demasiado los precios para asegurarse contra la inflación.

Los directores industriales recuerdan que el precio del níquel ha subido nueve veces desde 2001; el cobalto, 3,6 veces; los laminados de titanio, 4,3 veces; el queroseno, 3,1 veces; la electricidad, 3,9 veces; el gas, 4,5 veces; y la calefacción, más de 6 veces. El peso de materias primas y componentes en la estructura del coste se ha duplicado en los últimos años. Los salarios también han aumentado en comparación con 2001. Nominados en rublos, los productos se vuelven más caros pero su precio de exportación, en dólares, tiende a disminuir. Las operaciones dejan de ser rentables.

La productora de motores aéreos PMZ trabajó el pasado año con un margen del 3-6%, confiesa Mijaíl Dicescul, director de esta entidad. El precio de los componentes que se usan en la producción de PS-90F, motor para el avión de transporte Iliushin-76, aumentó en un 20-70% en 2007. Los proveedores explican la subida por el encarecimiento de metales a escala global pero se resisten a bajar los precios cuando la coyuntura del mercado mundial se invierte. "En el caso de motores de la gama PS-90A, los proveedores se comen hasta un 70-75% de los costes, y es francamente imposible sobrevivir con este nivel de precios. El Estado debería simplemente regular los precios", piensa Dicescul.

Varias empresas rusas del sector de hidrocarburos y de la industria automotriz han presentado ya una denuncia al Servicio Federal Antimonopolio afirmando que las plantas siderúrgicas fijan los precios mediante acuerdos de cártel.  

Rusia exporta hasta el 95% de los metales que produce vendiendo el resto en el mercado interno a precios mundiales. "Es un verdadero sabotaje, aparentemente inocente y camuflado por los mecanismos de mercado, pero que apunta en realidad a acabar con la industria", afirma Yuri Eliséiev, director general de la productora de motores aéreos Salut. Este empresario piensa que el Gobierno debería tomar "medidas urgentes para coordinar la política de precios en lo referente a las exportaciones y el cumplimiento de los pedidos públicos".

El conflicto de intereses entre el sector siderúrgico y la industria de defensa en Rusia puede solucionarse sin que se vean menoscabados los intereses de ambas partes. Bastaría con introducir simplemente un mecanismo de indexación real de las sumas que las empresas de defensa gastan en las materias primas.

Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала