Moscú, 12 de marzo, RIA Novosti. Un delfín ayudó a regresar a la mar a dos ballenas que perdieron la capacidad de orientarse bajo agua y entraron en una zona de baja profundidad en Nueva Zelanda, informa la agencia AP, alegando manifestaciones de testigos oculares y servicios de protección de la naturaleza.
Dos cachalotes - una madre y su cría - quedaron encallados en la playa de Mahia, a 500 kilómetros al Noreste de la capital del país, Wellington. Los socorristas necesitaron una hora para hacerlos volver al mar. Pero pasado un tiempo tuvieron que repetirlo todo de nuevo. Los cachalotes regresaron en cuatro ocasiones al banco de arena.
Según el experto Malcolm Smith, "ellos no lograban encontrar camino a mar abierto y volvían a encallar".
Parecía que los animales estaban condenados a morir de una muerte dolorosa, y los socorristas ya empezaban a pensar en rematarlos. Pero inesperadamente les acudió en ayuda un delfín favorito de la población local, llamado "Moco".
Según testigos oculares, "Moco" se acercó a las ballenas y empezó a conducirlas, para alejarlas del banco de arena. Los tres nadaron juntos unos 200 metros a lo largo de la costa, luego cruzaron un estrecho que había allí y salieron a la mar.
El biólogo Anton van Helden, del Museo Nacional de Nueva Zelanda, lo comenta como un acontecimiento sorprendente, pero verídico. Es sabido que los delfines descuellan por una conducta altruista, dijo.
Al quedar terminada la operación de socorrismo, "Moco" regresó hacia la costa y volvió a jugar en el agua, al lado de la gente.
