Teherán, 4 de enero, RIA Novosti. Las autoridades de Pakistán sabrán eliminar la crisis que surgió en el país tras el asesinato a finales de diciembre de Benazir Bhutto, ex primera ministra y una de los líderes de la oposición paquistaní. Lo ha manifestado en Islamabad este viernes el titular de Exteriores de Irán, Manuchehr Mottaki, al reunirse con el líder de Pakistán, Pervez Musharraf.
"Lamentablemente, el terrorismo se ha propuesto el objetivo de desestabilizar la situación en Pakistán. En Irán esperamos que el Gobierno de Pakistán logre superar la crisis y recuperar el control sobre la situación en el país", ha dicho Mottaki, a quien cita la televisión irania.
El titular de la diplomacia de Irán ha expresado su pésame al pueblo y el Gobierno de Pakistán y a los familiares de Benazir Bhutto con motivo del asesinato de ella.
"En Irán estamos convencidos de que el proceder de los terroristas desestabiliza la situación en la región", dijo el ministro.
La República Islámica está dispuesta a prestar ayuda a las autoridades paquistaníes en la solución de los problemas que afronta el país, señaló.
El presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, a su vez agradeció a la parte irania "por la solidaridad con el Gobierno de Pakistán, la que ella siempre expresa en los momentos críticos que suceden en la vida del país".
"Hace falta extirpar las raíces del terrorismo", subrayó el líder paquistaní.
La víspera, en Islamabad se anunció que las elecciones parlamentarias fijadas para el 8 de enero se posponían al 18 de febrero. Tal decisión se tomó en relación con el asesinato de Bhutto. Ella falleció el 27 de diciembre tras ser herida a gravedad por un terrorista kamikaze durante un mitin multitudinario en Rawalpindi. En el atentado perecieron en total 26 personas y unas 90 recibieron lesiones.
Tras la muerte de Bhutto, en el país comenzaron manifestaciones de protesta, las que en varias regiones desembocaron en desórdenes masivos.
