Todo indica que los empresarios extranjeros han reconocido a Rusia como uno de los mercados más prometedores para la inversión. El flujo neto de capitales privados - US$60.000 MM en lo que va de año - habla por sí mismo. Hoy en día, Rusia es un centro internacional de influencia económica y política, absolutamente nuevo, mucho más fuerte que antes y estable, admitió el lunes Stephen Jennings, presidente del grupo Renaissance Capital.
Según las previsiones de esta empresa, Moscú será en diez años la segunda capital financiera de Europa, después de Londres, y la quinta o sexta, a escala global.
El resurgir de Rusia ha pillado por sorpresa a la mayoría de los observadores y es percibido como amenaza por mucha gente, opina Jennings. "La velocidad con que Rusia ha recuperado sus posiciones en el escenario internacional provoca el descontento en algunos círculos, y los medios que ha usado para hacerlo, han sido diferentes al guión previsto. Para bien o para mal, Rusia ha optado por un camino notablemente diferente al que esperaba Occidente", señaló el empresario en una conferencia organizada por Renaissance Capital.
El ex secretario de Estado de EEUU, Colin Powell, observó a su vez que Rusia tiene derecho a perseguir sus objetivos tal y como estima conveniente, y que es una gran nación cuyos intereses políticos y económicos han de ser respetados.
La economía rusa logró en el primer trimestre un crecimiento fenomenal, del 7,9%, y podría cerrar el año, según las previsiones del FMI, con una tasa del 7%, cinco décimas por encima del pronóstico oficial.
La inflación encuadra en los límites previstos del 8%, así que los inversores se sienten muy confiados.
El proceso de reformas parece paralizado pero, en cambio, se están creando a ritmos acelerados las instituciones necesarias para el desarrollo.
Habrá mecanismos de dos tipos, de infraestructura e innovación, dijo ayer Andrei Sharónov, viceministro de Desarrollo Económico y Comercio de Rusia. El primer grupo incluye al Bando del Desarrollo, las zonas económicas especiales, el Fondo de Inversiones y los acuerdos de concesión. En el segundo estarán la Compañía Nacional del Capital de Riesgo (RVK, según la sigla en ruso), las empresas regionales del mismo tipo y la Corporación Nacional de Nanotecnología.
