Moscú, 22 de mayo, RIA Novosti. Los disminuidos físicos o personas que no son aptas para trabajar representan prácticamente un tercio de la población carcelaria en Rusia, según reveló el martes Alexandr Kononéts, subdirector del Servicio Federal Penitenciario (FSIN).
De casi 888.000 reclusos, 290.000 son minusválidos o tienen discapacitación completa o parcial para trabajar, dijo él.
La cifra incluye a más de 76.000 reclusos con trastornos psíquicos, 47.400 enfermos de tuberculosis, 43.800 drogadictos, 39.600 personas infectadas con el VIH, 38.000 alcohólicos y 24.500 disminuidos físicos.
