Tallin, 16 de mayo, RIA Novosti. Dirigentes de Estonia e Israel, así como los primeros rabinos de Israel, Rusia y Estonia han participado este miércoles en la ceremonia de inauguración de la nueva sinagoga en Tallin.
En su recinto, ubicado en la calle Karu, se encuentran también la escuela judía y el Centro de la Comunidad Judía de Estonia. Hasta hoy día Tallin era la única capital de un país miembro de la UE que no tenía sinagoga.
El edificio histórico, del siglo XIX, fue destruido durante la Segunda Guerra Mundial.
La construcción de la nueva sinagoga comenzó en Tallin en 2005 y costó cerca de 1,5 millones de euros. Los recursos fueron reunidos por medio de hacer donaciones personas particulares, organizaciones y compañías.
El donante principal, Alexander Bronstein (más de 1 millón de euros), pidió que la sinagoga estuviese dedicada a su madre difunta.
"No importa dónde se encuentre una sinagoga, siempre mira hacia Jerusalén. Esta nueva sinagoga es exponente de vínculos invisibles existentes entre Tallin y Jerusalén, es símbolo del resurgimiento de la comunidad judía en Estonia y de más estrechos vínculos entre los pueblos estonio y judío", dijo Bronstein en el acto inaugural.
La comunidad judía de Estonia cuenta con unas tres mil personas.
