Estrasburgo, 16 de abril, RIA Novosti. Alexánder Milinkévich, uno de los líderes de la oposición bielorrusa, reconoce que entre los oposicionista no hay unidad pero espera que las divergencias queden superadas en el congreso de la oposición que se celebrará en mayo próximo.
Al hablar en una rueda de prensa en Estrasburgo, Milinkévich dijo que después de que lo promovieron como candidato único por la oposición para las elecciones presidenciales, comenzaron discusiones sobre su futuro.
"Hubo debates acerca de que si tenemos que trabajar todos juntos o, ya que ahora no se celebran las elecciones presidenciales, mejor sería si cada cual trabajara por su cuenta y cooperar en algo", dijo.
Milinkévich piensa que "estos debates se prolongan demasiado porque nos ocupamos en ajustes de cuentas internos en vez de trabajar en provecho propio".
"Creo que este proceso (de discusiones) está por terminar, y nos hemos quedado en celebrar un congreso regional en que podamos resolver asuntos problemáticos", estima Milinkévich.
Preguntado por RIA Novosti cuándo pasará este congreso, dijo que "los optimistas esperan celebrarlo en mayo". Añadió también que el próximo congreso será bastante representativo.
Al comentar la visita que el año pasado efectuó a Bielorrusia el presidente de la PACE René van der Linden, Milinkévich se quejó que la visita se realizó sin condiciones previas que pudieran ponerse a las actuales autoridades bielorrusas.
"Semejantes visitas sin condiciones previas pueden ser más perjudiciales que útiles", piensa.
Milinkévich se encuentra en Estrasburgo para participar en las discusiones sobre el tema "estrategia de la democracia en Bielorrusia".
Los debates sobre este tema han sido adelantados. En vez de martes, se sostendrán el lunes por la noche.
A estos debates no asistirá por razones de la salud la esposa de Alexander Kozulin quien se encuentra encarcelado.
En su pasada reunión de Luxemburgo, la Unión Europea confirmó la llamada "lista negra" de representantes oficiales de Bielorrusia a quienes está prohibida la entrada en los países de la Unión Europea. La lista contiene 31 apellidos.
"La Asamblea pide que los Estados que no son miembros de la Unión Europea adhieran a las sanciones aprobadas hace poco respecto a los dirigentes de Bielorrusia", dice la resolución aprobada por la PACE en abril del año pasado sobre al situación en Bielorrusia.
No obstante, la PACE pidió que los países de la Unión Europea facilitaran la concesión de visados a los bielorrusos que representan la sociedad cívicas y a los estudiantes.
Al caracterizar en general la situación en Bielorrusia, el relator de la PACE, el estoniano Andres Erkel "condenó seriamente el carácter poco democrático de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 19 de marzo en Bielorrusia". En su opinión, esta actitud evidencia el desprecio de las autoridades bielorrusas por los valores y normas del Consejo de Europa.
Según datos facilitados por la Comisión Electoral Central de Bielorrusia, el actual primer mandatario Alexánder Lukashenko ganó el 83%. La PACE no cree que los resultados de las elecciones sean verdadera expresión de la voluntad del pueblo bielorruso.
La Asamblea cree también que las manifestaciones masivas que se celebran después de las elecciones "merecen solidaridad".
El documento dice que "la Asamblea considera su principal objetivo con respecto a Bielorrusia el cese del aislamiento del pueblo bielorruso" para lograr lo cual se propone "favorecer los contactos con las fuerzas democráticas, la sociedad cívica y ciudadanos sencillos de Bielorrusia".
El caso de Bielorrusia se discutió también en una reunión del Buró (uno de los órganos de dirección de la Asamblea) fuera de sede, celebrada en mayo pasado en Moscú.
