Moscú, 19 de marzo, RIA Novosti. Próximamente, en el litoral de varias regiones rusas aparecerán centrales nucleares flotantes de reducida potencia. Dicha central representa una gigantesca chalana de altura de un edificio de 10 pisos. Desplazará unas 21500 toneladas, será de unos 30 metros de eslora y 144 metros de longitud.
La primera barcaza de este tipo estará anclada, sin zarpar nunca, cerca de la empresa Sevmash, de Severodvinsk (en el Norte de la parte europea de Rusia). Está dotada de dos bloques generadores de energía con sus respectivos reactores. La minicentral nuclear abastecerá de energía a la empresa Sevmash. Esta misma central también es capaz de desalar agua y producir calor.
El respectivo contrato ya ha sido suscrito entre el consorcio Rosenergoatom y Sevmash, la empresa constructora de buques de guerra. El importe del contrato son unos 270 millones de euro.
El director general del consorcio, Serguei Obozov ha señalado que hasta finales de 2015 su empresa prevé construir una flota de 7 centrales. Las centrales flotantes están provistos de 5 niveles de protección, son capaces de resistir un terremoto de 7-8 grados en la escala Richter, un viento de hasta 45 m/s, fuertes nevadas, e incluso, una caída de avión tipo Yak-40.
Estas centrales ya han sido objeto de interés por parte de China, India, Tailandia y Estados del Golfo Pérsico y del Norte de África. Sin embargo, la construcción y funcionamiento de las centrales flotantes acarrea importantes riesgos ecológicos, según varios analistas rusos.
Además de aspectos ecológicos, estas centrales podrían ser objetos de amenaza terrorista, puesto que el Sudeste Asiático cuenta con docenas de organizaciones de este tipo que cuentan con buques, equipo y paramilitares, preparados para los actos subversivos subacuáticos.
"Los planes del Ministerio de Energía Atómica ruso de ofertar las centrales nucleares flotantes en otros Estados del mundo son sumamente peligrosos desde el punto de vista de la proliferación de armas de exterminio en masa", está convencida Natalia Mironova, la Presidente del Movimiento por la Seguridad Nuclear, "La cantidad del uranio altamente enriquecido, conocido como "nivel para armas" (weapons-grade), que contienen los dos reactores de la central, es suficiente para fabricar decenas de bombas".
No obstante, es poco probable que dichos razonamientos detengan a eventuales compradores. El atractivo de estas centrales para muchos países es su potencial desalador del agua, dado el vertiginoso crecimiento de este mercado. Según analistas del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), para 2015 su volumen puede crecer hasta 12 mil millones de dólares. Los datos de la ONU también demuestran un creciente déficit del agua dulce en el planeta que puede subir de 230 millones de metros cúbicos actuales a 2 billones en 2025.
